Campo Flores y Francisco Flores de Freitas – sobrinos del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, detenidos hace unas semanas en Haití por narcotráfico – se declararon inocentes en la primera audiencia ante el juez de Nueva York que lleva el caso.
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Hubo una demora en el inicio del juicio dado que las partes se encontraban negociando una aceptación de la culpa para reducir la pena máxima de cadena perpetua, sin embargo, no se llegó a ningún acuerdo.
Esto debido a que los sobrinos de Nicolás Maduro se resisten a delatar a los altos cargos del gobierno venezolano que estarían implicados en el negocio de la droga que los fiscales de Estados Unidos buscan esclarecer.
Por otra parte, la firma de abogados Patton Boggs — a cargo de la defensa de Efraín Campo — dejó el caso dado que prefiere no verse cuestionada por el posible incumplimiento de la ley estadounidense que exige demostrar la procedencia de los pagos recibidos por defender a acusados de narcotráfico.
Patton Boggs también tiene una estrecha relación con la petrolera venezolana PDVSA (a quienes han tenido muchas veces como cliente) y existía la sospecha de que los fondos pagados para asumir la defensa del sobrino de Nicolás Maduro podría tener origen público. Por eso, la firma de abogados ya empezó a devolver el dinero.
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