Pitufos y la contraloría

La convocatoria de la Contraloría General de la República a una ronda de exposiciones de los candidatos a la presidencia de la república respecto de sus planes anticorrupción provocó airadas reacciones entre quienes no fueron inicialmente invitados. Pues la convocatoria estuvo dirigida primero a los cinco favoritos según las encuestadoras. Al momento de protestar, el conocido como campeón del Facebook Julio Guzmán dijo que principalmente se había invitado a quienes de algún modo estaban vinculados con hechos de corrupción. Lo mismo expresó Fernando Olivera, quien llegó hasta el local de la Contraloría con una escoba –símbolo de su partido– para afirmar que la organización convocante había violado el principio de neutralidad electoral. –Esto es motivo suficiente para destituir al Contralor –dijo. Del vacío al lleno La rebelión de los denominados pitufos obligó a recular a la Contraloría, que terminó convocando a todos. De modo que el 3 y 4 de febrero hablarán en su foro los que acepten esta invitación. Pero una semana antes, el 25 y 26 de enero, expondrán los candidatos en el evento que Proética organizó, con el mismo propósito, en la Universidad del Pacífico. Habrá, pues, planes por partida doble. Hemos pasado de un vacío de propuestas anticorrupción, a una coyuntura en que habrá muchas. Esto plantea varias preguntas. Una primera cuestión tiene precisamente que ver con la Contraloría. ¿Es parte del problema o de la solución? El crecimiento de la gran corrupción en los últimos años dejó en claro que la Contraloría no pudo prevenir ni sancionar. Un estudio de la Defensoría del Pueblo ha señalado que las denuncias de la Contraloría no tienen buen prospecto en las fiscalías anticorrupción, faltando determinar si se debe a una débil fundamentación o a deficiencias del Ministerio Público, o a ambas cosas. Al referirse a la problemática, el Contralor Fuad Khoury reclama mayores facultades. El Congreso ya satisfizo uno de sus pedidos: anuló las penas suspendidas para los sentenciados por corrupción. Todos pagarán cárcel.
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